Hoy, Joaquín...

Después de tanto tiempo al fin te has ido
y, en vez de lamentarme, he decidido
tomármelo con calma.
De par en par he abierto los balcones,
he sacudido el polvo a todos los rincones
de mi alma.

Me he dicho que la vida no es un valle
de lágrimas... y he salido a la calle
como un explorador.
He vuelto a tropezar con el pasado
y he decidido, en el bar de mis pecados,
otra copa de ron.

Y en otros ojos me olvidé de tu mirada
y en otros labios despisté a la madrugada
y en otro pelo
me curé del desconsuelo
que empapaba mi almohada.

Y en otros puertos he atracado mi velero
y en otros cuartos he colgado mi sombrero,
y una mañana
comprendí que aveces gana
el que pierde a una mujer.

Con el cartel de libre en la solapa
he vuelto a ser un guapo entre las guapas
chulapas de Madrid,
sólo me pongo triste cuando alguno,
en el momento más inoportuno,
me pregunta por ti.

Y en otros ojos me olvidé de tu mirada
y en otros labios despisté a la madrugada
y en otro pelo
me curé del desconsuelo
que empapaba mi almohada.

Y en otros puertos he atracado mi velero
y en otros cuartos he colgado mi sombrero,
y una mañana
comprendí que aveces gana
el que pierde a una mujer.

Para abrazos estan sus palabras...

Admirable escritor de mi tierra y adorable ser humano que apareció en la biblioteca de mi casa cuando era una niña todavía y me llevó, paso a paso, a su mundo. Sus libros siempre permanecen cerca, sus cuentos me llaman cada vez que ando necesitando su voz.

Hoy lo escucho en esta entrevista, más bien informal, en las acampadas de plaza catalunya, y pienso... y sigo pensando en tantas cosas que ha dicho, en una charla de poco mas de 10 minutos, y creo que vale la pena compartir.

No se expresa solo a través de la palabra, sino que pone todo su cuerpo en marcha para crear esto que brota casi espontaneamente... utilizando una visión tan romántica como cabe a la situación. Cada cosa dicha es una idea afirmada, creída y defendida.

Escuchen atentamente y si quieren, solo si quieren, me cuentan que les pareció... y con que se quedan...

Día de...

Hay pocas cosas que me acuerdo de mi niñez… y no porque no quiera, sino porque mi memoria es pésima. Pero algo que vengo haciendo hace tiempo ya, es llenar las los huecos con inventos (lindos, claro), siempre y cuando no hay alguna amiga por ahí diciéndome: “estas mintiendo!”. No es una mentira! Tienen que entender que no está bueno tener mala memoria.

Lo que si me acuerdo, es de sentirme protegida, amada, y acompañada. Una madre incondicional, un hermano belicoso y más fuerte que yo, un primo que admiraba y otro que ni bola, un abuelo atento que siempre me protegía, una abuela brava, y una tía loca (si, tía!), y papá & cía… los domingos :S

Un grupo de amigos eterno! Nuestra vida entera nos une… un viaje que empezó en la escuela del barrio y hoy sigue por distintas partes del mundo… pero mantiene sus orígenes.

Y fue eso… pensar en el día del niño me llevó a mi familia y a mis amigos… que fueron en definitiva… mi niñez.