viernes, 14 de febrero de 2014

Destino...

Qué pasaría si pudieras saber cómo desarrollar tu destino? Es decir, si quisieras saber que cosa o que cosas tenés que hacer  para que lo que está escrito para vos se dé.

Qué pasaría si ya lo sabes? Si siempre lo supiste, y aun teniendo la opción, elegías mal. No por arrogancia (dirían algunos) sino por esa fe ciega que te lleva a pensar que podes, dando lo mejor de vos, cambiar a esa persona que se te metió tan adentro.

Pero la realidad pesa, y siempre te da un sacudón, y aunque te acostumbras a estar pesada y sin rumbo, seguís haciendo las cosas mal. Que tontos somos. Que tonta soy.

Pero esto no va de lo que pasó, sino de lo que va a pasar. Iluminación le dicen algunos. Tomar las riendas, otros. Elegirte a vos.

Querés más de lo mismo? Entonces ya sabes que hacer. Querés ser feliz? Déjalo atrás.

Y sí, quiero. Con todo mi ser.

miércoles, 12 de febrero de 2014

Tiempo de...

Ayer, después de un tiempo considerable, ví una película super linda. Bueno, eso. Linda, super linda. No soberbia, o excelente o candidata a premios de cine independiente. Simplemente una peli que me gustó.

De que se trataba? Vamos que ya saben. Romance le dicen los que hablan de género. Pero empezaba con un poco de fantasía, los que me conocen saben que me fascina, cuando no quedan muchos cabos sueltos, la unión entre lo real y lo imposible.

Entonces, en lo que me dejó pensando es en las oportunidades, en los comienzos, en esos momentos especiales de lucidez donde sabemos hacia dónde ir, o en esa suerte de intuición que aparece en momentos confusos y te ayuda a tomar un camino. Pero qué pasa cuando estas oportunidades no son aprovechadas, no son reconocidas como lo más importante que te pueda pasar en la vida?

Y acá es lo que amo del cine. Se pude hablar del destino de una forma tan concisa, claro, sale todo de un guión ya escrito, un final seguro. Entonces esas oportunidades que se sucedían eran si o si causantes de cambios radicales para los posibles futuros. Alteraban el destino. Tanto así, que el mismo protagonista (y acá otra vez la peli y su capacidad fantástica…) podía alterar el tiempo y llegar para tomar otra alternativa, y de esa forma cambiar el transcurso de los hechos. Que perseguía? El amor de su vida.

Pensándolo bien no es tan distinto a la realidad (excepto por el hecho de que no podemos viajar en el tiempo, claro), pero me da algo así como pánico pensar en errores del pasado. En situaciones que me han hecho quien soy (entera y de a pedazos) y que podrían haber sido manejadas de otra forma. En esas concesiones que uno va haciendo, pactos con uno mismo y con otros, y que después lo van destruyendo de a poco. Pero nunca lo dice.

Hay algo más, que vendría a ser el mensaje, y se trata de agradecer cada minuto de la vida, así como venga (para los bobos que no rompemos las barreras del tiempo). Si son momentos difíciles, con la confianza de que van a  pasar (ya a enseñar). Pero si no lo son, con la plena conciencia de que somos afortunados.

Por último, pero no por eso menos importante, hubo otra cosa que le sumó puntos, y es que la haya protagonizado el hermano mayor de los Weasley (#ñoña) ; )