jueves, 12 de julio de 2012

Un viaje de fin de semana, yendo de lo tranquilo a las raíces, voy pensando, voy soñando, mientras afuera se da un cielo azul encendido y lleno de estrellas. Y entiendo que solo en mis sueños experimento la felicidad extrema.

2 comentarios:

Gaia dijo...

Bueno, manejar los sueños a nuestro antojo es relativamente fácil, lo difícil, pero no imposible, es llevarlos a la realidad.

Mientrastanto, disfruta de ese viaje.

Un besazo :)

Maya dijo...

Absolutamente!
Seguía en esa línea la idea... je
Beso!!